Almu Morell es la fundadora de la Escuela Almu Morell, una escuela internacional de gimnasia hipopresiva online. Este proyecto internacional surgió como una manera de seguir impartiendo clases durante el confinamiento.
En la actualidad, Almu Morell y su equipo tienen más de 200 alumnas diarias en 40 países diferentes.
Apostar por los canales online me ha ayudado muchísimo a llegar a mujeres de otros países a los que jamás habría llegado si sólo hubiera seguido con las clases presenciales.
Entrevista a Almu Morell, fundadora de la Escuela Almu Morell
Cuéntanos en qué consiste la Escuela Almu Morell y qué ofreces a tus clientes.
La Escuela Almu Morell es una escuela internacional de gimnasia hipopresiva online. Imparto clases en directo por canales digitales, pero no sólo eso: también ofrecemos la posibilidad de hacer la certificación del método que te titule como profesor de la técnica de hipopresivos.
Además, intentamos ir más allá de lo digital: en la medida de lo posible impartimos clases presenciales.
Se trata de un proyecto internacional: hacemos formación en todo el mundo y en la actualidad estamos trabajando con mujeres de 40 países.
¿Cómo y cuándo surgió el proyecto?
Llevo tiempo trabajando como profesora del método y dando cursos, pero sólo lo hacía de manera presencial en Chile, que es donde he vivido los últimos 6 años.
El hecho de dar un giro a la escuela y apostar por las clases online surgió para cubrir la necesidad de mis alumnas de seguir entrenando durante la pandemia y los meses de confinamiento.
¿Cómo fueron los comienzos y qué barreras encontraste a la hora de emprender?
Pues la verdad que yo lo que hacía era ir subiendo vídeos a Instagram... y las alumnas empezaron a llegar solas.
Es cierto que al principio de todo resultó un poco complicado gestionar el tema de las reservas, pero encontré una app con la que pude solucionar ese problema y dar un mejor servicio a mis alumnas.
Ahora mismo, dado que entrenamos en 40 países diferentes, te diría que la mayor dificultad con la que nos encontramos en el día a día de la escuela es gestionar la diferencia horaria entre países.
¿Ha cambiado mucho el proyecto desde aquellos inicios compartiendo vídeos en Instagram? ¿Cómo es ahora Almu Morell Hipopresivos?
Mucho no… ¡muchísimo! Al principio hacía clases de una en una. Tenía cuatro clases a la semana, luego ocho, después quince… y hoy la Escuela Almu Morell ya cuenta con 200 alumnas diarias. ¡Un gran crecimiento!
Háblanos de tus clientes. ¿Quién es tu target?
La mayoría de las alumnas que entrenan en nuestra escuela son precisamente mujeres, casi todas con edades comprendidas entre 25 y 55 años. Destacan también las que se encuentran pasando su posparto y quieren un entrenamiento específico para recuperar la forma y su musculatura.
¿Cuál sería tu sello de distinción? Ese que hace que te elijan frente a otros competidores.
En nuestra escuela apostamos por las clases en directo y eso permite hacer correcciones instantáneas a las alumnas. Es fundamental realizar ese acompañamiento para evitar lesiones y garantizar la máxima calidad en el entrenamiento.
A día de hoy no hay clases grabadas, aunque es cierto que nos las piden mucho y posiblemente también termine ofreciendo esa opción.
Por otro lado, destacaría la comodidad de horarios, con un amplio abanico de propuestas donde elegir, y la puntualidad a la hora de dar las clases: ¡el tiempo es oro!
Y, por supuesto, también nos distingue la cercanía: queremos que nuestras alumnas se sientan ‘en casa’ y que el entrenamiento sea una experiencia más allá del ejercicio físico.
¿Por qué te decidiste a crear la página web de tu proyecto? ¿Cómo crees que te ayudará a impulsar tu negocio?
Para mí la página web es una necesidad. Hablamos de una herramienta imprescindible cuando tienes un negocio online.
Creo que me ayudará muchísimo a la hora de ofrecer una información completa a mis alumnas y a facilitar todo el proceso de reserva de clases.
¡Invierto muchísimo en ayudar a mi comunidad y mejorar la experiencia de compra de mis alumnas!
¿Qué te llevó a participar en el concurso del GoTeam?
La prima (@laprimadiseno) me envió la información del concurso y dijimos: «Por mandarlo, no perdemos nada»… aunque obviamente no teníamos expectativas de ser uno de los negocios ganadores. ¡No se pueden imaginar la alegría y emoción que sentimos el día que supimos que habíamos ganado!
La pandemia de la COVID-19 ha cambiado nuestro mundo y los negocios… y nos comentabas que, de hecho, te digitalizaste precisamente por el confinamiento. ¿Qué ha supuesto para ti este salto digital?
Apostar por los canales online me ha ayudado muchísimo a llegar a mujeres de otros países a los que jamás habría llegado si sólo hubiera seguido con las clases presenciales.
¿Algún consejo para quienes se estén planteando emprender?
Mi consejo es que empiecen por regalar. Aportar valor a su comunidad. Después, vender productos baratos y, a partir de ahí, ir creando otros con cada vez más valor. Y siempre con entusiasmo, cariño… ¡y dedicación 24 h!