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“La página web era la única pata de la mesa que sostenía el negocio durante el estado de alarma”

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Leticia Calvo

Ana Belén Domínguez trabajaba en el sector de las tecnologías de la información, pero se dio cuenta de que necesitaba un cambio que le aportara una mayor satisfacción personal y profesional. Siendo una persona inquieta, bastante curiosa y con una gran habilidad en las manualidades, decidió montar una pequeña tienda de barrio en la que pudiera ofrecer productos artesanos, desde telas, lanas, ovillos, y cualquier accesorio para elaborarte tus propias prendas de vestir. Así nació AMIMU.

Durante los tres años que lleva la tienda abierta, ha ido ampliando el negocio y ahora cuenta con un espacio creativo en el que sus alumnos y clientes puedan aprender diferentes técnicas para la elaboración de prendas.

No puedo estar desocupada, si no tengo algo que hacer... me lo invento. Me gustan los productos y el trabajo hecho con mimo, en busca del mejor resultado posible.

Entrevista a Ana Belén, fundadora de Amimú

  1. ¡Hola, Ana Belén! Cuéntanos, ¿cuándo y cómo surgió el proyecto de Amimú?

El proyecto empieza tras una breve etapa de reflexión. Tenía que volver a buscar trabajo, pero mi cuerpo no quería seguir por el mismo camino. Hubiera sido más fácil (porque mi profesión, relacionada con las tecnologías de la información, estaba en un muy buen momento, ¡mejor que el de las lanas!). Pero necesitaba un cambio, continuar con algo que me aportase la satisfacción personal que mi profesión había dejado de darme. Quería volver a sonreír yo, laboralmente, y ver sonrisas en quienes me rodeaban.

  1. ¡Suena a un gran cambio! Y ahora, cuéntanos un poco más sobre ti. ¿Quién es la encargada de todo ello?

De mente y cuerpo inquieto, no puedo estar desocupada. Si no tengo algo que hacer, ¡me lo invento!

Me gustan los productos y el trabajo hecho con mimo. Siempre estoy en busca del mejor resultado posible, y para ello me gusta rodearme de personas y equipos apasionados e involucrados. Eso es algo que he podido ver con el paso del tiempo reflejado en todas mis etapas de estudiante y también profesionales.

  1. ¿Y cómo fueron los comienzos del proyecto?

¡Un no parar trepidante! De buscar local, de investigar, de buscar proveedores, ahora lo siento como si me hubiera tirado de golpe a la piscina. El darse a conocer es el paso que más tiempo lleva, llevo 3 años con la tienda y todavía hay gente que vive en la calle de detrás y entra pensando que “soy nueva”.

Entrevista a Amimú
  1. ¿Y cómo son vuestros clientes? ¿Quiénes suelen ser vuestro target?

La mayoría son mujeres de mediana edad, aunque cada vez hay más chicas jóvenes y hombres que salen a la luz contando que ellos también tejen, o queriendo empezar a hacer labores.

  1. Tengo entendido que también organizas actividades en la tienda. ¿Qué tipo de talleres hacéis?

AMIMÚ es una tienda especializada en lanas, pero también un Espacio Creativo para aprender técnicas en el que ofrecemos cursos y talleres. Como persona inquieta que soy, estoy organizando actividades y eventos especiales siempre que puedo.

  1. Este año está siendo especialmente complejo para los pequeños negocios. ¿Cómo ha afectado el Covid a tu negocio? ¿Has hecho algo para reinventarte y obtener más ingresos?

Hemos tenido que reducir el número de plazas en los cursos y ampliar el espacio de talleres con una mesa más grande, además de sumar al presupuesto habitual gel hidroalcohólico y material para higienizar la zona de forma constante.

Tenemos hasta un purificador de aire, lo principal es que las clientas y alumnas se sientan seguras y cómodas cuando vengan.

Entrevista a Amimú

De forma online buscamos asesorar y acompañar a las tejedoras casi como si vinieran a la tienda física, con una atención al cliente lo más personalizada y ágil posible. En estos tiempos en los que desplazarse no es fácil para todas, queremos seguir a su lado.

  1. Y hablando del mundo online, ¿desde cuándo tienes la página web de Amimú?

Desde el mismo día que subí el cierre de la tienda física por primera vez. Es algo que, viniendo como vengo del mundo de la informática, tenía súper claro: AMIMÚ tenía que tener presencia online y en redes desde el minuto 1.

  1. ¿Por qué decidiste abrir esta versión del negocio?

El comercio local es complicado. Como ya he comentado hay gente que viviendo a menos de 5 minutos de la tienda aún no sabe que existe. ¡He tenido clientas online que han descubierto después de meses comprándome por la web que me tenían al lado de casa! Además, suma la comodidad y ahora también la tranquilidad que ofrece comprar desde el sofá...

La tienda online es un complemento para la tienda física, y viceversa: la una se alimenta de la otra para ser un TODO lo más completo posible y poder así ofrecerlo.

Además, soy multidisciplinar. Me gusta tener tareas diferentes que hacer. Así, el trabajo sea más entretenido y ameno.

  1. ¿Crees que te ha ayudado la página web en la crisis de la COVID-19? ¿Y antes de la pandemia?

¡Claro! Cuando tuvimos que cerrar las tiendas físicas era la única pata de la mesa que quedaba para sostenerla, como digo yo. Y ahí aguanté.

Entrevista a Amimú

Además, me ayudó a mí y ayudó a muchas mujeres. Me escribían mensajes dándome las gracias porque así podían estar entretenidas en casa, tejiendo o bordando, o para contarme que por el Día de la Madre le habían enviado ovillos a las suyas para que tuvieran algo con lo que distraerse. Ofrecía, en cierto modo, salud mental.

  1. ¿Por qué elegiste GoDaddy cómo empresa de creación de tu página web?

La verdad es que ya había probado vuestros servicios bien y durante muchos años -antes de ser GoDaddy incluso- y siempre me fue bien. Así que, mejor lo bueno conocido que experimentar.