Si decimos que hoy en día somos prácticamente incapaces de vivir un día entero sin echar un ojo a las redes sociales, no estamos muy lejos de la realidad.
Su nivel de popularidad no deja de crecer a medida que nuevos mercados y usuarios realizan su primera toma de contacto con plataformas como Facebook, WhatsApp o Instagram, por mencionar algunas de las más conocidas.
Todos sabemos por qué tienen tanto éxito. Fotos de animales, saber qué hacen tus amigos porque ellos publican stories con sus actividades diarias o recibir titulares en tweets son algunas de las bondades de registrarse en las redes, aunque no todo es color de rosa mientras las usamos.
El mundo digital actúa como una red en la que los hackers, los ciberdelincuentes o traficantes de datos traten de imponer su ley a costa de los malos vicios de los usuarios.
Por ello, es necesario protegerse y tomar una serie de medidas que nos priven de sufrir consecuencias emocionales, sociales y financieras. Internet está democratizado, es decir, todo el mundo puede usarlo con buenas y malas intenciones. Y, por tanto, todo el mundo sin excepción puede acabar expuesto a los peligros de las redes sociales.
Por ello, en este artículo trataremos de recoger los principales peligros actuales en el mundo de las redes sociales y cómo podemos evitar caer en la trampa.
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9 tipos de riesgos y peligros de las redes sociales
Las empresas detrás de la creación y difusión de sus plataformas saben lo que tienen entre manos. Por ello, trabajan constantemente para mejorar su seguridad y proteger a las personas usuarias de estas plataformas frente a ataques de los ciberdelincuentes.
Códigos de verificación, encriptación de mensajes y demás medidas ponen tierra de por medio y son una buena forma de limitar en gran medida la actuación de aquellas personas que solo buscan lucrarse a costa de los demás.
Otra medida muy básica, pero que es necesario seguir recordando, es la edad mínima de acceso a cada plataforma. Cuántas veces hemos visto a personas menores de edad usando las redes sociales con el consentimiento de sus padres, cuando sobre el papel no debería ser posible.
En este sentido, en España la edad mínima para tener una cuenta es de 13 años para Twitter y Snapchat, 14 años para Facebook e Instagram, 16 años para LinkedIn y WhatsApp y 18 años para YouTube, aunque en este último caso debemos matizar que los servicios de la matriz Google establecen la edad mínima en 16 años.
Si se detectan cuentas usadas por personas menores de edad que engañaron a la plataforma para vencer el requerimiento de la edad mínima para acceder, pueden verse cerradas dichas cuentas notificando dicha acción por email.
Pero, más allá de los riesgos de niños que están presentes en estas redes, las personas adultas también podemos sufrir las consecuencias del mal uso de estas plataformas.
Para saber cómo evitar los peligros de las redes sociales, lo primero es tener claro cómo identificarlos. Existen muchos riesgos asociados con el uso inadecuado de las redes sociales, pero a continuación vamos a profundizar en seis de los más preocupantes.
1. Ciberacoso
Esta forma de acoso se lleva a cabo a través de las plataformas digitales. Las víctimas del ciberacoso pueden recibir mensajes de odio, acoso en línea o difamación, lo que puede provocar consecuencias psicológicas graves entre las que se incluyen la depresión y la ansiedad.
Utilizar las redes sociales de forma responsable y respetuosa es una de las claves para no caer en esta trampa. Además, buscar ayuda profesional, ya sea en forma de asistencia legal o psicológica, es importante para gestionar estos riesgos de las redes sociales.
Cuantos menos datos personales se publiquen, mejor. El centro de estudios, el lugar de nacimiento o a dónde nos vamos de vacaciones son datos útiles para quien quiera acosar o amenazar a sus víctimas. Un correcto manejo de las redes sociales y el conocimiento de los peligros que atañen es vital para evitar todo tipo de acoso a través de una red social.
2. Phishing y fraudes
Los ataques de phishing y las estafas online se han convertido en problemas de las redes sociales cada vez más comunes. En ellos, los estafadores utilizan mensajes engañosos con la intención de robar información personal y financiera. Estos ataques pueden llevar a la pérdida de datos sensibles y a problemas bancarios.
Normalmente estos enlaces suelen redirigir a páginas web o a lugares en la red que contienen virus camuflados en forma de anuncios o publicaciones, con los que pueden enviar mensajes de spam, o directamente hacerse con datos más privados.
Para evitar estafas y scams en internet, es importante confirmar la autenticidad de los mensajes y las ofertas recibidas. Además, es esencial comprobar que la página web a la que se nos redirige dispone de un certificado SSL fiable.
3. Exposición a contenido inapropiado
Uno de los mayores peligros de las redes sociales para los adolescentes es que pueden exponer los usuarios a contenido inapropiado, como los de violencia, sexualidad explícita o discursos de odio. Esto tiene un impacto negativo en su desarrollo y en su percepción del mundo.
Para evitarlo, es importante utilizar herramientas de control parental y supervisar sus actividades en línea siempre que sea posible.
4. Adicción a las redes sociales
La adicción a las redes sociales es un problema cada vez más presente en nuestra sociedad. Cada vez hay más personas que pasan horas y horas leyendo mensajes y viendo vídeos sin un propósito real, lo que afecta su productividad, a sus relaciones personales y reduce el tiempo que dedican a actividades más enriquecedoras, como leer o hacer ejercicio.
Para evitar este problema, es necesario imponer límites de uso y ser realmente conscientes del uso que le damos a las plataformas sociales.
5. Problemas de privacidad y seguridad de datos
La recopilación y el uso indebido de datos personales por parte de terceros sin consentimiento es un riesgo significativo en las redes sociales. Debemos ser conscientes de las configuraciones de privacidad disponibles y tener mucho cuidado a la hora de compartir información personal para proteger nuestra privacidad y seguridad en línea.
Además, utilizar software de VPN de calidad protegerá nuestra actividad online de cualquier tipo de amenaza o rastreo.
6. Impacto en la salud mental
El uso excesivo de redes sociales ha sido vinculado a problemas de salud mental, como ansiedad, depresión y baja autoestima, especialmente entre los jóvenes. La comparación constante con otras vidas idealizadas y la búsqueda de validación a través de ‘likes’ pueden deteriorar el bienestar emocional.
Ante esto, es tan importante ser conscientes de que no todo lo que vemos en redes sociales es real como buscar ayuda en caso de experimentar sensaciones y efectos negativos.
7. Inseguridad personal. Vivir por y para los likes
Este problema, generado sobre todo entre los jóvenes, se debe a su momento vital en el que deben desarrollar relaciones con otras personas de su edad o similar. Si bien tradicionalmente estos se hacía en persona, las nuevas tecnologías han trasladado la creación de nuevas relaciones a través de la pantalla de un móvil.
La cuestión radica en el momento en que la persona solo está pendiente de recibir o no una alerta en su teléfono, tras haber subido stories o publicar contenido que considere atractivo para la gente y esté esperando que tenga solicitudes de amistad o mensajes directos en cascada, cuando no debería ser así.
Hay diversos documentales que ponen de manifiesto los mecanismos de seducción de las redes sociales, tanto para personas adultas como para personas menores de edad. Por ejemplo, The Social Dilemma. Aun así, el conocimiento de los peligros de las redes sociales y ser conscientes de cuándo tenemos un problema de adicción también es vital.
Conocida como la Generación Like, su peligro es no reforzar autoestima y no ser populares si no reciben likes constantemente en sus perfiles.
Otros peligros de las redes sociales y que actúan también en Internet a todas las escalas posibles ya los hemos analizado en nuestro blog, como pueden ser los ataques de malware o por scam, phishing o cybersquatting. De ahí que sea importante mantener un nivel de seguridad en la red alto y, sobre todo, no pulsar enlaces ni aceptar mensajes extraños.
8. Ojo con el futuro laboral
Otro de los peligros de las redes sociales está vinculado con la reciente práctica hecha por parte de los departamentos de recursos humanos de las empresas a la hora de localizar a los candidatos a un puesto de trabajo.
Con la excusa de buscar más información sobre los candidatos, les sirve como un primer filtro para descartar aquellos que causen una primera impresión negativa que acabe siendo definitiva.
Por tanto, si tienes fotos íntimas o comprometidas que puedan ser vistas, elimínalas cuanto antes.
También se tienen en cuenta posibles publicaciones y mensajes que den una mala imagen sobre tus opiniones, por lo que se recomienda no interactuar demasiado en redes sociales más allá de lo estrictamente necesario.
Puede pasar que alguien intente publicar comentarios que atraigan tu atención para que respondas y a partir de ahí se genere una interacción que acabe en difamaciones, publicación de contenido subido de tono, etc.
Por otro lado, uno de los grandes problemas que acarrea el uso de las redes sociales se centra en el poder de adicción que traen consigo. Si antes hablábamos de los jóvenes como víctimas del like, a toda la población le afecta el hecho de pasarse muchas horas enganchados al móvil leyendo noticias y comentarios Twitter, cotillear publicaciones de amigos en Facebook o TikTok en horas de trabajo.
Muchas empresas, sobre todo en ambientes cercanos, intentan saber si el candidato o candidata abusa de sus dispositivos personales en horario laboral. De esta manera, puede saber si es idóneo para el puesto o si una vez contratada dicha persona, no hará bien sus tareas por estar distraída.
9. Fake news
También conocidos como bulos, desde hace pocos años la aparición de las fake news han cambiado la opinión de millones de personas sobre cualquier tema que tenga gran difusión.
La técnica se centra en publicar y expandir noticias falsas hasta que lleguen masivamente a todo el público de una red social, con el peligro que entraña leer y no contrastar la información vertida desde un medio concreto.
En España los temas políticos están centrando las miradas de los “desinformadores”, lanzando supuestas informaciones sobre una determinada persona, pero que a las pocas horas acaba siendo desmentido o corregido para evitar o limitar la manipulación de la opinión pública.
Por último, y lo incluimos dentro de las fake news aunque se puede extender a otros ámbitos, es muy peligroso publicar determinados comentarios ofensivos que descalifiquen a otra persona, porque pueden acabar teniendo repercusiones legales.
Hablar sobre un tema político o sobre creencias religiosas y hacerlo sobre noticias falsas suele ser una mezcla letal para leer opiniones radicales.
Aunque haya gente que no lo crea, usar Facebook o Twitter no es más que poner en texto los pensamientos de una persona, por lo que mucho ojo al publicar comentarios de los que luego te tengas que arrepentir.
Conclusión
Los peligros de las redes sociales existen. Están ahí latentes cada día y, si no se tiene un mínimo nivel de manejo de las redes sociales, las consecuencias pueden ser fatales.
Por eso, hacemos ahora un repaso a las principales recomendaciones para evitarlos:
- Configura la privacidad de tus perfiles de manera que solo tus amigos vean tu información.
- Evita publicar datos personales o tus planes sobre las vacaciones.
- No aceptes solicitudes o mensajes de cuentas o personas desconocidas.
- Evita pulsar URLs abreviadas que no conozcas su procedencia.
- Informa sobre cuentas sospechosas u ofensivas.
- Crea cuentas separadas para tu vida personal y (si es necesario) para tu vida laboral.
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